martes, 15 de mayo de 2012

Cuando llega un niño...

La llegada de un bebé en una familia con perro, o de un perro en una familia con niños, siempre genera alguna preocupación. Iniciar con buen pié significa realmente poder construir una relación familiar sana y armoniosa y poder disfrutar de la compañía de un animal y que él disfrute con nosotros.
Las dudas y preocupaciones más comunes residen en las interacciones entre niño y perro y en posibles reacciones inesperadas y peligrosas del perro. En la mayoría de los casos, un perro equilibrado y sano no presentará problemas y acogerá la novedad con curiosidad. No obstante la s precauciones nunca son demasiadas y debemos considerar unos puntos fundamentales.
La entrenadora americana Jennifer Shryock ha creado un verdadero plan de educación destinado a las familias que quieren asesoramiento sobre como construir una sana relación entre el niño y el perro.





Esta entrenadora pone el acento en la importancia de la SUPERVISIÓN ACTIVA de todas las interacciones. Cuando se trata de bebé está claro que no es posible enseñarles a interactuar correctamente con el perro, así que la actuación de los padres es primordial. Jennifer ayuda a los padres a saber qué hacer antes de la llegada del bebé y a guiar sus interacciones con el perro.  

En este seminario on line (webinar) Jennifer Shryock pone muchos ejemplos de cómo podemos realizar una supervisión activa durante las interacciones entre el niño y el perro. Los padres deben entender las señales de estrés o inquietud del animal y guiar las interacciones para que el niño aprenda a acariciar al perro de la forma correcta, saber acercarse e entender al final, cuando sea mayor, el lenguaje del animal.



Antes de la llegada del bebé

Educación básica: es muy importante que los propietarios tengan un buen control del animal. Así que si no está adiestrado, es necesario hacerlo, al menos en cuanto a la educación básica.

Horarios y rutinas: antes de que nazca el bebé empezaremos a establecer unas rutinas coherentes con las que adoptaremos después. Los horarios de los paseos, la habituación a pasear con el cochecito, la presencia en casa de todos los artículos que utilizaremos para el bebé.

Acondicionar el ambiente: puede ser útil utilizar pequeñas vallas o box para poder poner el niño durante la supervisión. Comprar un intercomunicador será útil para poder cerrar la puerta del niño mientras duerme.

Cuando llega el bebé a casa

Ha llegado el momento de hacer las presentaciones. Todo debe suceder con calma, sin estrés y agitación. Es importante que el propietario tenga alguna ayuda para poder saludar al perro sin tener que coger a la vez el bebé. En caso contrario podría tener que alejar al perro que se manifieste con demasiada energía o curiosidad hacia esta novedad. Así que, una vez entrados en casa empiezan las presentaciones… Si se trata de un perro excitable, esperaremos que se calme, por ejemplo poniéndolo en otro cuarto y cuando todo esté tranquilo le dejaremos salir. Debemos actuar con calma, sin miedos o hesitaciones.  El perro podrá oler, acercarse e incluso podemos permitir algún lametazo…es importante estar muya atentos a la postura y al lenguaje gestual del perro. Si se muestra temeroso o inseguro, lo acariciaremos y encorajaremos; si vemos gruñidos o posturas rígidas, intentaremos utilizar correcciones verbales. Siempre en presencia del niño haremos que pasen cosas positivas, premios, caricias e interacciones. Nunca agitaremos al niño en el aire delante del perro para no fomentar la excitación.
En cerca de tres semanas las cosas deberían haber adquirido cierta rutina y si no ha habido problemas podemos pensar que el niño ha sido aceptado por el perro, aunque NUNCA se debe dejar solo a un perro con un niño.
Otra cosa indispensable es dedicar tiempo exclusivo al perro. Puede ser complicado conciliar las cosas, pero es importante interactuar con el perro, jugar solo con él, llevarlo de paseo y sobre todo no apartarlo de la vida de la familia. Debe ser parte de todo lo que sucede y compartirlo para poder mantener su equilibrio emocional.










Enseñar al menos la educación básica
Dejar que el perro huela al niño
Exponer gradualmente el niño al perro
Asociar experiencias agradables con la presencia  del niño
Dedicar al menos diez minutos a la interacción exclusiva con el perro










Dejar solos al niño y al perro
Aislar al perro
Reñir al perro que interacciona con el niño
Excitar al animal
Forzar el animal a la interacción


4 comentarios:

  1. Hola Vera,
    Me encanta tu post, me parece super interesante. Sobre todo porque conozco mucha gente que quería mucho a su perro hasta que se quedaron embarazados, no se qué tendrán los ginecologos y las matronas contra los perros, que en vez de dar consejos sobre una buena desparasitación y una buena adaptación (como la que comentas en el artículo) se dedican sólo a recomendar que el perro desaparezca de la familia... Y lo triste es que les hacen caso!!!!
    Yo por ahora no tengo niños, pero lo que tengo clarísimo es que mis perritas son parte de la familia y eso no cambiará por mucho que cambie la familia, nos adptaremos todos a los cambios, pero incluyéndolas a ellas también. Y creo que es lo de ley.
    Saludos!

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    1. Gracias por tu comentario.
      La verdad es que he decidido escribir sobre el tema después de que me comentasen que una mujer que se había quedado embarazada había sacrificado a su perro que, según lo que decía, adoraba. Esto me ha llenado de tristeza, rabia y también me ha hecho pensar que la ignorancia es la madre de todos los males. Por esta razón creo que el trabajo de asesoramiento de Jennifer Shryock es muy importante, no solo porque estas crueldades no pasen más, pero también en la prevención de accidentes y mordeduras de niños que, según las estadísticas, son más comunes en ambiente doméstico.

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  2. Muy bueno Vera!!!
    Siempre das grandes ideas y consejos sobre temas muy utiles!
    Estoy seguro que como educador canino, recibiré muchas preguntas relacionada a la relación perro-niño, y esto me lo pone mas claro sobre como enfrentarnos a este problema.
    Ci sentiamo ;)

    Ciaoo

    Matteo

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    1. Grazie Matteo
      Estoy convencida que para que se cree una buena relación con nuestro animal es indispensable empezar correctamente.
      Me alegra poder ser útil para que sea posible, sobre todo que personas como tú, que están en "primera línea" con los propietarios puedan encontrar "inspiración" para poder a su vez difundir "buenas prácticas" de adiestramiento y convivencia.
      Hasta pronto :)

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